lunes, 1 de agosto de 2011

SUBIDA A LA "MADA"

4pm del 30 de julio de 2011. Salida del "Chicharra" (FEVE) a las 4.15 para ir al Estrecho de San Ginés donde me recogerían la Capi y Juan Ernesto para ir a Novelda a participar en la 25º edición de la Subida al Santuario de Sta. Mª Magdalena; carrerita de 12 kilómetros con cuestas, unas mas duras que otras, bonita, y en la que en ediciones anteriores la gente ha pasado mucho calor, pero...

...al llegar hacía fresquito, incluso estaba encapotado amenazando con lluvia. Cumplimos con el protocolo de llegada, consistente en fotos, recogida de dorsales y recepción de amigos y compis de club: "Cuando perteneces a un club tiene que existir una complicidad, confraternidad y se establece un vínculo", comenta la terremoto Calonge; sabíamos lo de Gacela pero "¿quién me llama Terremoto?", se sorprende.

También coincidimos allí con el Maestro Moratinos, a quien admiro. Acaba de escribir un libro - "Ser feliza corriendo"- sobre sus principios, investigaciones y teorías en educación aplicadas al mundo del running, maratones y ultramaratones. Está en proceso de imprenta para poder presentarlo y sacarlo a la venta.


Tras un necesario calentamiento, llegó la hora de acudir a la cámara de salida. La organización se encargó de dar las indicaciones necesarias para evitar accidentes, descalificaciones, de felicitar a un grupo corredor que apoyaba la lucha contra el cancer de mama, así como recordarnos que la carrera ya cumplía 25 años y que la prueba se autofinanciaba con nuestra participación. Tras agradecer a todos su asistencia, se dio el pistoletazo de salida; vuelta a la pista y salida a terreno urbano; primero los valientes minusválidos y después el aplastante pelotón de unos 1300 personas - este año se batía participación-. Esta carrera sería un entrenamiento previo al Veleta, ya mis compis Peralicas iban por delante.


Durante la carrera iba muy cerquita de Moratinos y con una chica del equipo local - el club de verdiblancos Club Atlético de Novelda - que se llamaba Cristina.

De vez en cuando los vecinos de la localidad nos pegaban un manguerazo de refresco, sólo si se les pedía para no importunar a nadie.

Objetivo conseguido: subir todas las cuestas a trote, mantener el ritmo, regulando e ir de menos a más.

Cristina propone que entremos de la mano, le dio un poco de flato, aflojamos un poco para respirar y tirón fuerte hasta la meta. 1.10 con muy buenas sensaciones. La Calonge y compis animando desde la barrera esperando a recoger obsequios. Son unas makis. Antes de recoger bolsa, lo primero era asistir a Cris que llegó mareada "seguid trotando, si no se encuentra bien, al hospital de campaña, seguid, seguid" y esperé a que se recuperara, ayudada por otras corredoras que venían detrás... y ya agüíta y a pillar camiseta, bolsa, sandia y bebida energética.
Me despido de Cristina y  la felicito por tan espectacular tirón y buena carrera para reunirme con compis de club, intentar echar mano de la mochila para poder darme un chapuzón en la pisci, pero no espero y me tiro de golpe con lo puesto, duchita fresca en la pisci y a secarme para cenar con los compis en el garito del Poliesportiu.
La Capi y Juan Ernesto no llegaban porque ella había hecho podio en su categoría -

tras las previas reclamaciones para que se incluyesen más categorias en femenino a la carrera - . Faltó también inscribirnos como equipo femenino de federadas y hubiésemos pillao cacho y pagar la cena, jejej.

A la cena se unieron los Correbirras y Moratinos, así como nuestra compi Peralica Toñivi. De ser una mesa de 8 acabamos siendo 28, hasta las mil, y acabamos con las existencias: de birra, calamares, ensaladilla, queso fresco frito con salsa agridulce, sardinas, bocatas, helados, fruta y café.


...y para rematar la faena chupito de hierbas a lo John Wayne y al año que viene disfrutaremos de un espectáculo flamenco de la mano del cantaor Miguel Poveda, tío del encargado de la cantina. El pelotón se fue dispersando, fuimos recogiendo bártulos.
"Venga adiós buenas noches", bromeaba Juanernesto. Así que nos fuimos yendo porque ya rozábamos los afterhours de los eventos deportivos,

 "¡CIERRABARES!"

2 comentarios:

  1. Como era la única pringá del grupo que trabajé ese dia, y al siguiente tb, no pude correr, pero a la cena si llegué, y pasé un buen rato con tantos amigos. Que las próximas cervezas lleguen pronto!!

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  2. Eh, que nosotr@s no cerramos el bar... que el bar se cerró él solito!!!!
    Ja, ja, jaaa.....

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