domingo, 21 de abril de 2013

¿Cómo recuperar después de competir? 3 trucos para que todo vuelva a la normalidad.

Especial para mis peralicas fortaleceras.
Fuente: runners.es
1 MEJOR CAMINA Es mucho mejor dejar que tu ritmo cardiaco vuelva poco a poco al estado de reposo que parar de modo brusco tras cruzar la línea de llegada. Ayudarás a eliminar el ácido láctico muscular y comenzarás antes el proceso recuperatorio.

2 CON APARATOS Date un baño de 10 minutos de agua helada, ponte unas medias de compresión o masajes con un rodillo de espuma te pueden ayudar a eliminar la inflamación. Son remedios eficaces y a tu alcance.

3 OLVIDA EL ASFALTO Aunque te pueda la tentación de rodar el día siguiente, aguántate las ganas. Si tienes la absoluta necesidad de hacer ejercicio, busca un deporte de bajo impacto. Luego prueba con rodajes suaves. Hacer mucho demasiado pronto te puede lesionar.

¿Cómo te motivas para volver a correr en primavera?

Me apunto a una carrera 44%
Corro en grupo 6%
Actualizo mi ropa de correr 5%
Me peso 2%
Todas las anteriores 8%
Yo no pierdo la motivación 35%
LOS NÚMEROS CORREN

60 El máximo tiempo (en minutos) para reponer tus reservas de glucógeno después de entrenar. Trata de beber o comer entre 200 y 300 calorías (el tamaño aproximado de una pelota de tenis) de carbohidratos y proteínas. Si no quieres llenarte, prueba un batido de chocolate.
VERDAD O MENTIRA

No necesito descansar si no tengo ni dolor ni rigidez.

MENTIRA Los días de descanso y rodajes suaves son claves. No necesitas sentirte medio murrto para descansar. Descansar o bajar el ritmo una semana te ayudará a regenerar las fibras musculares dañadas y dejarte a tono para el siguiente entreno de calidad. No Te Machaques

¿Mucho estrés? Correr puede ser una solución, pero para otros, una fuente de ansiedad. Los estudios demuestran que un alto nivel de ansiedad interviene en el proceso de recuperación, aumentando la posibilidad de enfermar o lesionarte.

viernes, 19 de abril de 2013

Correremos sin miedo


La recta de meta de un maratón esconde meses de esfuerzo y sacrificio. Meses de ilusiones compartidas y de pequeños sueños de grandeza. Imagino a ese puñado de corredores populares enfilando los últimos metros del maratón más antiguo del mundo. Los imagino visualizando el gesto que harán al cruzar la meta, de quien se acordarán o de cómo lo celebrarán.

Imagino a ese atleta aficionado que ve un reloj que marca las cuatro horas y nueve minutos. Imagino su orgullosa sonrisa ya nada disimulada, sus ojos vidriosos y su alma de hombres o mujeres invulnerables. Han vencido al dolor, al cansancio y al agotamiento. Dejaron atrás el temido muro sin sospechar que unas millas más adelante la estupidez humana iba a cercenar el humilde sueño de quien aspira a ser grande sólo por un pequeño instante .

Imagino a esos corredores que escuchan un estruendo. Un instante de parálisis antes de preguntarse ¿“Dios, donde están los míos”? ¿”Estarán bien? “ Los imagino olvidándose de la medalla que persiguieron durante casi un año de duros entrenamientos y sacrificios, buscando el desesperado abrazo de sus parejas, hijos y amigos que esperaban entre el público. Imagino el reencuentro y las lágrimas de alivio antes de rescatar el espíritu solidario que llevan puesto todos los maratonianos. Los imagino a salvo y con la mente en las decenas de heridos y en los tres muertos. Los imagino chapurreando en inglés para explicar a la Policía y a los voluntarios de Boston que quieren echar una mano. Que quieren ayudar. Los imagino camino de los hospitales para donar sangre o simplemente para consolar a las víctimas y a sus familias.

Escribo estas líneas convencido de que quien o quienes hayan colocado los artefactos no podrán asomarse nunca al espíritu del maratón. Los bastardos que han matado a un niño de 8 años y a dos espectadores y que han mutilado a decenas de personas han conseguido sólo eso. Mutilar a decenas de personas. No entenderán nunca que un maratoniano no se rinde jamás. Que no cede ante las adversidades por muy cargadas de “goma 2” o tornillos que vengan. Que un “runner” no renunciará a la LIBERTAD de correr 42 kilómetros y 195 metros por las calles de las ciudades más importantes del mundo.

Esos malnacidos no entenderán que el maratón es un ejemplo de esfuerzo, entrega, sacrificio, solidaridad y compañerismo. Y no entenderán que todos nosotros, todos los runners, ya imaginamos, sin miedo, cómo será el final de nuestro próximo maratón. Levantaremos la vista, apuntaremos al cielo y recordaremos a los que nos dejaron en Boston.

Óscar Vázquez, periodista y maratoniano. (eluniversodemartina.com) (@oscarvazquezcar)


martes, 16 de abril de 2013

Luto y rabia

Con rabia e impotencia hemos asistido al brutal atentado que ha convertido el maratón de Boston en un auténtico baño de sangre.
¡EXPRESAMOS AQUÍ NUESTRA CONDENA Y REPULSA!

lunes, 15 de abril de 2013

Lidia presumiendo de Club en la contraportada de la opinión de hoy



Campeona Regional de Media Maratón

Fin de semana cargadito de participaciones de nuestras chicas.
Olga Campeona Regional de medio maratón y Consuelo subcampeona.
Peralicas por todas partes, en Puerto Lumbreras Lidia, María Barbero en la media y Toñi en el 10500
En Murcia por el Parkinsson Mónica Zapata, Mari Ángeles y Laura Moreno.
También en duatlón Cristina Latorre
¡NO PARAMOS!
ENHORABUENA A TODAS Y EN PARTICULAR A NUESTRA FLAMANTE CAMPEONA!



sábado, 13 de abril de 2013

Samantha Vallejo-Nágera: "El maratón de Nueva York es mi carrera favorita"

"Empecé a correr ya de pequeña. Me acuerdo cuando tenía 12 años que me iba a participar en carreras por toda España, con un amigo mío. He sido siempre de fondo más que de velocidad, y lo cierto es que lo hacía por hobby."

"Casi siempre suelo salir a correr yo sola, con la única compañía de mi Ipod. Pero reconozco que me encanta cuando quedo con gente para correr porque me parece más divertido, ya que quedas en sitios diferentes a los que vas habitualmente, se hace otro itinerario, podemos incluso subir a una montaña, o hacer un plan original; me divierte mucho."

"Llevo una mezcla 'brutal' de músicas. Puede saltar una canción de ‘bakalao’ de ese que me gusta a mí, que son “cantaditas”
y de repente la siguiente es un tema flamenco, o latino… Pero todo muy marchoso, me ayuda y me motiva muchísimo."

"Suelo estirar después de correr, pero antes poco o nada. Luego lo que intento es compaginarlo con el yoga para relajar todo el cuerpo, por lo menos una vez a la semana."

"Voy al doctor Hernán Silván. Tengo mucha confianza en él, arregla muy bien las contracturas deportivas. Estuve lesionada, de hecho hice el maratón de Nueva York coja casi todo el recorrido, y luego me costó casi un mes recuperarme."

"Me encanta llevar las zapatillas en la maleta cuando viajo. Así puedo salir a correr. Estar por ejemplo en París e irme a correr debajo de la torre Eiffel. Estas cosas me gustan mucho, me parece una manera divertidísima de hacer turismo."

"Miami me ha encantado, me parece genial para correr. Ahora mismo [la entrevista está realizada en 2010] estoy embarazada y no puedo entrenar pero estoy deseando dar a luz para irme para allá porque es una maravilla la playa, el paseo que tiene especial para entrenar, gente corriendo por todos lados y un ambiente de deporte espectacular."

"El maratón de Nueva York es mi carrera favorita con muchísima diferencia. Es el primer maratón que he hecho. También he participado en carreras populares, la Carrera de la Mujer, la Media de Madrid,... Vamos, cosas muy sencillas, pero la experiencia de correr por la Gran Manzana me ha encantado. Vives una película por toda la ciudad. Es un fenómeno social y deportivo. Disfruté de todos los entrenamientos días antes con amigos, luego me encantó ver Nueva York a la carrera. Hacer los 42 km por una ciudad en la que recorres sus barrios en cuatro horas. Totalmente recomendable."

"Así como en el trabajo soy meticulosa, no soy nada “tiquismiquis” con la equipación que llevo para correr. De hecho, hasta hace poco, yo corría con unas zapatillas que no son de running, y ahora tengo unas mejores pero normalitas."

"Cuando tenga mi último hijo, que nacerá en abril [2011], me volveré a poner en forma y con las ganas que tengo (sonríe) voy a acabar vigoréxica perdida. Me veréis de nuevo por la zona de Canal en Madrid que es donde vivo, o si hace mucho frio me cogeré la moto y me iré al Retiro. Eso sí, los fines de semana por Segovia respirando aire puro."

Entrevista publicada en el número 107 de Runner's World (Enero 2011)


jueves, 4 de abril de 2013

¿Qué camino elegir?

Fuente: Runners.es
Cada día que corres tienes que tomar decisiones: qué camino seguir, qué distancia, y si buscar compañía. Aunque es fácil seguir la rutina, también es bueno considerar las diferentes opciones. Mezclar es bueno para tu forma y para tu estado mental. Si te encuentras en una encrucijada, así sabrás como elegir con inteligencia.

¿10 MINUTOS O NADA?

¡Sal y corre! Incluso algo tan corto como 10 minutos te ayuda a mantenerte cuando no hay tiempo para más. Y esa pequeña desconexión aumentará tu estado de ánimo. (Y, si te lo montas bien, no necesitas ducha)



¿DENTRO O FUERA?

Si llueve torrencialmente quizá debas refugiarte en la cinta. Aunque, siempre que sea posible, deberías correr en el exterior. ¿Por qué? El primer motivo es el aire fresco, mucho más agradecido. Además el tiempo pasa más deprisa. Y si quieres competir, entrenar fuera te ayudará a adaptar tu cuerpo a los impactos del suelo y al efecto de las condicioens meteorológicas.

¿SÓLO O ACOMPAÑADO?

Correr con un amigo es una grandísima motivación. Un buen amigo te motivará para correr, te ayudará cuando la cosa se complique e incluso te ayuden a ir más rápido. Pero si estás cansado, sales de una lesión o de un parón, mejor no salgas con alguien demasiado rápido porque puedes reincidir. Lo mismo se aplica con alguien más lento que tú, que impedirá que progreses.

¿CAMINO O CARRETERA?

Correr por montaña es un gran modo de divertirte y salir de la rutina. Cambia el paisaje, la experiencia e incluso tu forma de correr ya que el terreno es más blando y desigual. Pero si sufres de tobillo, olvídate. El asfalto es más seguro para tus renqueantes tobillos.

¿CON O SIN RELOJ?

Esta es fácil: si un reloj te motiva para correr más rápido, más tiempo o más distancia, llévatelo. Si aumenta tu ansiedad, déjatelo en casa.

martes, 2 de abril de 2013